21.3.07

MAURO GERMAN CAMORANESI


Los recuerdos de Mauro (Tandil, Buenos Aires, 1974) de aquella final de 1978 son muy difusos. Kempes, Passarella y un júbilo inmenso en las calles de Tandil, una ciudad situada en pleno corazón de la provincia de Buenos Aires. Estampas demasiado lejanas para Germán, como le llaman en su familia. Siempre le gustó el fútbol, sobre todo cuando fue consciente de lo que aquel pequeño gigante futbolístico llamado Diego era capaz de hacer con el balón. Fue Méjico el país que consagró a su ídolo en aquel Estadio Azteca y fue también allí donde puso rumbo a Italia. El camino opuesto que había hecho su abuelo cincuenta años antes.
Algunos de sus técnicos en su primera etapa mejicana afirmaban que era un futbolista tardío. Y es que hasta los 19 años no firmaría su primer contrato como profesional. Fue con el Santos Laguna. Desde allí volvería a Argentina para jugar su única temporada en casa con Banfield, donde sus actuaciones como extremo derecho comenzaron a ser objeto de conversación en el fútbol argentino. Pero su velocidad y regate eran enterradas por la brillante generación de fútbolistas que lideraba el Muñeco Gallardo en River, el equipo de sus amores. Talentos que le llevaron a buscar sitio en el Cruz Azul azteca, su última parada camino de Italia. 32 goles en 80 partidos y un apellido italiano despertaron la atención del Verona de la Serie B.
No le costó mucho trabajo meterse en el bolsillo al fervoroso público veronés. En el estadio Marco Antonio Bentegodi, los murmullos crecían cuando Maurizio ponía la directa. Dos destacados años en la Segunda División italiana que le llevaron a Turín a cambio de 3 millones de euros y Max Vieri, el hermano pequeño de Christian. En la Juve tropezó con Zambrotta, el fichaje estrella de Lippi, al que no tardó en quitarse de enmedio llamando la atención de Giovanni Trapattoni. Ésa fue una de las causas por las que Camoranesi cambió la albiceleste por la azzurra, como ya hicieron a principios de siglo Raimundo Orsi o Julio Libonatti. Causa que se unió a su palpable distanciamiento con Marcelo Bielsa. Italia volverá a contar con un jugador nacido fuera de sus fronteras 42 años después, el tiempo transcurrido entre el brasileño Benedicto Sormani y Mauro Camoranesi.
Aunque Camoranesi nació en Argentina tuvo la posibilidad de jugar para la selección de Italia gracias a sus raíces. Su partido debut con la selección azzurri fue el 2 de febrero de 2003, contra Portugal, en la ciudad de Génova. Después formó parte del equipo italiano que viajó a la Eurocopa del 2004.
Cuando aceptó la oferta de Giovanni Trapattoni para jugar con Italia, en vez de esperar a ser convocado por la selección argentina declaró: "No soy un traidor, aún me siento cien porciento argentino. Sólo que es un asunto de fútbol, eso es todo". Ha jugado 17 partidos con Italia, habiendo anotado 1 gol.
Fue convocado por el técnico italiano Marcelo Lippi para disputar la Copa Mundial de Fútbol de 2006, para el Seleccionado de Italia de fútbol, siendo, de los cuatro equipos semifinalistas, el único jugador de origen argentino -David Trezeguet es francés de nacimiento-. El día 9 de julio de 2006, con esa selección, Camoranesi se consagró Campeón del Mundo.

[información facilitada por Carlos Guisasosla,
en elmundo.es y wikipedia]